Una investigación de Billboard estableció que de manera indirecta el artista Bad Bunny tendría relaciones con el régimen chavista en Venezuela, y que todo se remite a la firma Rimas Entertainment, disquera establecida en 2014, ya que este sello fue fundado por el manager de Bad Bunny, Noah Assad, pero también una figura muy cercana al presidente Hugo Chávez: Rafael Ricardo Jiménez. 

Recordemos que Jiménez fue viceministro de Seguridad Jurídica del Ministerio de Relaciones Interiores de Venezuela entre 2006 y 2013, mientras Chavez estaba en el poder.

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Acerca de su vinculación con Rimas Entertainment, Billboard estableció que el venezolano invirtió dos millones de dólares, y que Assad, quien es su socio y la cara visible de la empresa, aseguró que Jiménez era solo un inversor, admitiendo que no estaba enterado de su vinculación con el gobierno venezolano. 

Rimas Entertainment tiene oficinas en Miami, Puerto Rico, Medellín y Caracas, y además de Bad Bunny, también representa a Arcangel, Mora, Eladio Carrión y Jowell y Randy. 

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Actualmente hay en marcha una reorganización de la propiedad de la empresa, y que, según los medios especializados, probablemente dejará a Bad Bunny con una participación accionaria, y a Assad como socio mayorista.

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